El proceso educativo en nuestras vidas es complejo y se compone de muchas variables: los valores y tradiciones de nuestra familia, las costumbres de nuestra cultura, nuestras vivencias y las experiencias que podemos aprender de ellas y, en última instancia, la educación formal que recibimos.
Ésta última jugará un rol importante en nuestras vidas, ya que la mayoría de las personas deciden su futuro en base a la educación formal que han recibido. Tanto padres como hijos confían en que los sistemas de educación tradicionales proveen las herramientas para asegurarse un buen futuro, ya que ésta posee la aptitud de preparar a una persona para que se pueda insertar en el mercado laboral con éxito.
Es todo cuestión de sacarse excelentes notas, estudiar una carrera y luego encontrar un buen trabajo.
Sin embargo, ésta fórmula de éxito no es válida para todos los niños. Si así fuera, todos los alumnos de un curso deberían poder tener buenas notas, egresar con gran éxito y encontrar un trabajo idóneo. Y todos sabemos que no es así. Dentro de un curso siempre hay un par de alumnos destacados, luego están "los del montón" y un par de alumnos considerados diplomáticamente "de rendimiento regular", que son los típicos niños con problemas escolares.
¿Por qué existe ésta diferencia siendo que la escuela supuestamente está diseñada para suplir a toda una población con la educación necesaria para salir adelante en la vida?
¿Será que algunos poseen una inteligencia superior y otros carecen de ella? ¿Es la vida realmente regida por una mal llamada "ley de la selva" en la cual el más inteligente y fuerte gana y el resto tiene que arreglárselas con las migajas que sobran?
Lamentablemente muchas personas jóvenes se quedan con ésta idea, ya que tienen malas experiencias en su período escolar. Y muchos de ellos nunca se recuperan del sentimiento de inferioridad que adquirieron en la escuela.
Yo personalmente no creo que algunas personas simplemente nacen más inteligentes y tampoco creo en la suerte. Yo creo que cada ser humano es diseñado por Dios mismo para vivir una vida plena y con un propósito determinado. También estoy convencida de que Dios no crea fracasos. Con su inmensa sabiduría y su asombroso poder ha creado al ser humano con una gran diversidad de habilidades y talentos.
Cada ser humano tiene un área en el cual es particularmente dotado—o inteligente--y es ésta el área en el cual debería enfocarse para así poder desarrollar su fortaleza a su máximo potencial.
Se pueden distinguir 8 diferentes tipos de inteligencias, aunque existen infinitas combinaciones de todos ellas.
No estoy en contra de las escuelas, pero veo que solamente son provechosas para cierto porcentaje de niños, aquellos que poseen dos de las siete inteligencias que existen: la lingüística y la matemática. Por eso muchos de los problemas en la educación formal de los alumnos radican más bien en el sistema y no en el individuo, ya que el sistema por su diseño no puede entregar otra educación que no sea genérica.
Todos los alumnos que no posean las primeras dos inteligencias bien desarrolladas, van a sufrir en su proceso educativo en mayor o menor grado, ya que tienen fortalezas en otras áreas que no son contempladas como ramos importantes en los establecimientos educacionales.
Si usted ha tenido, o su hijo está experimentando problemas en el sistema de educación actual, no se preocupe. No es porque su hijo tenga una inteligencia inferior a los demás. Simplemente significa que no se está tomando en cuenta la inteligencia con la cual él fue dotado.
Ayúdele a su hijo a descubrir sus fortalezas y a enfocarse en ellas. Uno de los ingredientes claves de una buena educación es que el alumno tenga experiencias de éxito. Una vez que haya logrado desarrollar sus fortalezas, va a poder atacar sus áreas débiles con un espíritu de superación y no de derrota.
Ésta última jugará un rol importante en nuestras vidas, ya que la mayoría de las personas deciden su futuro en base a la educación formal que han recibido. Tanto padres como hijos confían en que los sistemas de educación tradicionales proveen las herramientas para asegurarse un buen futuro, ya que ésta posee la aptitud de preparar a una persona para que se pueda insertar en el mercado laboral con éxito.
Es todo cuestión de sacarse excelentes notas, estudiar una carrera y luego encontrar un buen trabajo.
Sin embargo, ésta fórmula de éxito no es válida para todos los niños. Si así fuera, todos los alumnos de un curso deberían poder tener buenas notas, egresar con gran éxito y encontrar un trabajo idóneo. Y todos sabemos que no es así. Dentro de un curso siempre hay un par de alumnos destacados, luego están "los del montón" y un par de alumnos considerados diplomáticamente "de rendimiento regular", que son los típicos niños con problemas escolares.
¿Por qué existe ésta diferencia siendo que la escuela supuestamente está diseñada para suplir a toda una población con la educación necesaria para salir adelante en la vida?
¿Será que algunos poseen una inteligencia superior y otros carecen de ella? ¿Es la vida realmente regida por una mal llamada "ley de la selva" en la cual el más inteligente y fuerte gana y el resto tiene que arreglárselas con las migajas que sobran?
Lamentablemente muchas personas jóvenes se quedan con ésta idea, ya que tienen malas experiencias en su período escolar. Y muchos de ellos nunca se recuperan del sentimiento de inferioridad que adquirieron en la escuela.
Yo personalmente no creo que algunas personas simplemente nacen más inteligentes y tampoco creo en la suerte. Yo creo que cada ser humano es diseñado por Dios mismo para vivir una vida plena y con un propósito determinado. También estoy convencida de que Dios no crea fracasos. Con su inmensa sabiduría y su asombroso poder ha creado al ser humano con una gran diversidad de habilidades y talentos.
Cada ser humano tiene un área en el cual es particularmente dotado—o inteligente--y es ésta el área en el cual debería enfocarse para así poder desarrollar su fortaleza a su máximo potencial.
Se pueden distinguir 8 diferentes tipos de inteligencias, aunque existen infinitas combinaciones de todos ellas.
- Ø La inteligencia lingüística o verbal: la habilidad con las palabras
- Ø La inteligencia lógica-matemática: la habilidad con los números
- Ø La inteligencia visual-espacial: la habilidad con las imágenes
- Ø La inteligencia corporal-kinestética: la habilidad corporal
- Ø La inteligencia musical y rítmica: la habilidad con los sonidos
- Ø La inteligencia interpersonal: habilidad con las personas
- Ø La inteligencia intra-personal: inteligencia emocional
- Ø La inteligencia natural o ecológica: habilidad con los animales y con su entorno
No estoy en contra de las escuelas, pero veo que solamente son provechosas para cierto porcentaje de niños, aquellos que poseen dos de las siete inteligencias que existen: la lingüística y la matemática. Por eso muchos de los problemas en la educación formal de los alumnos radican más bien en el sistema y no en el individuo, ya que el sistema por su diseño no puede entregar otra educación que no sea genérica.
Todos los alumnos que no posean las primeras dos inteligencias bien desarrolladas, van a sufrir en su proceso educativo en mayor o menor grado, ya que tienen fortalezas en otras áreas que no son contempladas como ramos importantes en los establecimientos educacionales.
Si usted ha tenido, o su hijo está experimentando problemas en el sistema de educación actual, no se preocupe. No es porque su hijo tenga una inteligencia inferior a los demás. Simplemente significa que no se está tomando en cuenta la inteligencia con la cual él fue dotado.
Ayúdele a su hijo a descubrir sus fortalezas y a enfocarse en ellas. Uno de los ingredientes claves de una buena educación es que el alumno tenga experiencias de éxito. Una vez que haya logrado desarrollar sus fortalezas, va a poder atacar sus áreas débiles con un espíritu de superación y no de derrota.